Un poeta se desangra de tantas lágrimas derramadas
en el eco del silencio del dolor de la humanidad.
Somos el parto de tu dolor
lanzamos al viento las quimeras de tantas
injusticias…
Somos esos locos atrevidos sin miedo a tus juicios.
La ventana se abre
entra el aire puro al respirar el amor
incondicional.
Somos el instante del ímpetu del ser
Somos la libertad del vuelo
Somos los latidos de la humanidad
Somos las entrañas abiertas a la vida
Somos lo que somos: poesía libre al vuelo.
© : Irma Ariola Medina
Foto de la red.
No hay comentarios:
Publicar un comentario